En homenaje al histórico pasaje en el que la Virgen de Guadalupe se manifestó a Juan Diego, hemos creado una serie de vitrales que capturan los momentos cumbres de este evento trascendental.

Estos vitrales son una verdadera obra de arte en la que se emplea la técnica de Pintura a Fuego. A través de esta técnica, los trazos de los rostros de los personajes, los volúmenes y las sombras en las vestimentas, así como los diseños detallados, se realzan para lograr una representación lo más realista posible. La pintura a fuego es un proceso manual, en el que uno de nuestros talentosos artistas pinta a mano sobre el vidrio, que luego se hornea. Esto confiere a la pieza la capacidad de resistir la humedad, el sol y garantiza que los trazos sean consistentes en ambos lados del vitral.

Esta obra de arte se ha instalado en las ventanas de una iglesia, con la intención de iluminar y, al mismo tiempo, invitar a la reflexión dentro del recinto. Cada vitral es una ventana a la historia y la devoción, un recordatorio constante de la profunda fe y la belleza artística que pueden unirse para inspirar y elevar el espíritu de quienes lo contemplen.